SubPorno

**En construcción**

SUBPORNO
Laboratorio de Porno-resistencia

SubPorno es un colectivo post-pornográfico de disidencia sexual chileno, co-gestor del proyecto: “Laboratorio de Porno-resistencia”, un espacio de talleres iniciado por la CUDS (Coordinadora Universitaria por la Disidencia Sexual) y revista Disidencia Sexual (www.disidenciasexual.cl). Tiene como antecedente al Primer Taller de post-pornografía denominado “post-pornografía y violencia reciente en Chile”, que se realiza en Santiago de Chile en el marco del Circuito Disidencia Sexual de la CUDS, en abril de 2009. En el segundo semestre de 2009, se junta un equipo técnico al proyecto CUDS de taller post-porno regular, para así potenciar su aspecto audiovisual. Lxs integrantes de esta colaboración luego deciden formar el colectivo SubPorno.

El colectivo SubPorno nace de la necesidad de sus miembrxs por profundizar en las potencialidades críticas, políticas y audiovisuales del post-porno, a través de distintos dispositivos de experimentación. SubPorno se desplaza entre diferentes plataformas e instancias de creación, con el fin de rescatar, de tales actividades, vídeos experimentales post-pornográficos. Estos últimos, dentro de márgenes políticos y teóricos que otorguen al material audiovisual el carácter de experimentaciones reflexivas y prácticas en torno a las dinámicas de “representación del sexo”, desde una perspectiva crítica al binario de género y a las hegemonías sexuales, culturales, geográficas y económicas.

En colaboración con CUDS, SubPorno desarrolla talleres bisemestrales, abiertos, públicos, y gratuitos, en los que participan no más de 20 personas, previa inscripción. Bajo un eje temático, cada taller se desarrolla en tres partes: La primera, teórica y reflexiva (exposición, lectura, dialogo, revisión de material audiovisual, etc.), luego una práctica (actividades teatrales movimiento, y desenvolvimiento) y tercero una performática (desarrollo de improvisación y experimentación erótica y audiovisual). La performatividad sexual del cuerpo de lxs participantes es registrada por el equipo técnico de SubPorno. El material es editado y exhibido en Revista Disidencia Sexual (sección CUDSTV) y en el blog de SubPorno, y al mismo tiempo divulgado en muestras y circuitos de la CUDS, y en otros contextos similares.

El colectivo SubPorno desarrolla también actividades autónomas de creación audiovisual y performance en vivo. A través del espacio de registro, buscamos servirnos del cuerpo de nuestrxs colaboradores, y del de los integrantes del colectivo, como un molde cargado de formas de acción y reacción sexual, capaz de ser estimuladx hacia un devenir disidente, liberado de normas y comportamientos condicionados por una cultura, grupo o identidad. Como colectivo, SubPorno pretende exponer una mirada crítica de la sociedad a partir de la representación sexual. Generar material audiovisual que ilustre, en forma y contenido, la disidencia sexual de sus integrantes. Desarrollarse como un espacio de creación y experimentación post-pornográfico, donde nuestrxs cuerpos y cámaras entran en participación con otrxs, en búsqueda de subversión.

Buscamos poner un foco y una cámara al submundo que nos rodea, y retratar los rostros, cuerpos, (des)géneros, sexos y actos de aquellxs a lxs que tenemos al frente, asumiendo su potencialidad erótica y discursiva. Generar audiovisualidad que no sólo excite sino que cuestione los códigos, cuerpos, roles y prácticas de la sexualidad de los sujetxs.

SubPorno

Mail de contacto: subporno@gmail.com.

Próximo taller CUDS_SubPorno: fines 2010.

LA CONTRASEÑA PARA TODOS LOS VÍDEOS ES "VAMOSAJUGAR". // THE PASSWORD FOR ALL VIDEOS IS "VAMOSAJUGAR". // LE MOT DE PASSE POUR TOUTES LES VIDEOS EST "VAMOSAJUGAR".


VIDEO DE PRESENTACION COLECTIVO SUBPORNO





¿Talleres CUDS_SubPorno? : la versión local del posporno po’

por Aurora Tristán Ayelante para la página Disidencia Sexual de la CUDS

Posporno gratis, para todxs y hecho en casa. Esa es la alternativa que ofrecen los talleres CUDS_SubPorno, una instancia que nació en el Primer Circuito Disidencia Sexual y que hoy ya va por su cuarta versión. Observar, registrar u actuar son algunas de las formas de partipar en estas instancias. Lo que importa aquí no es empelotarse, sino subvertir.

Una lucha en barro, el Informe Valech , el bullying. Todas estas temáticas han servido de excusa para los talleres de Posporno de la CUDS. Una iniciativa que se concretó por primera vez en junio del año pasado, durante el Primer Circuito de Disidencia Sexual. La idea era realizar “talleres donde la gente pueda entender y poner en práctica la Teoría Queer, a través de la acción, creatividad, apariencias y juegos con el cuerpo. Para así desafiar y pervertir los limites, tabús y los binarios del género y sexualidad”, explica Delphine Lebel, miembrx de la CUDS y una de las coordinadoras de esta experiencia.
El Posporno nace como una forma de mostrar otro tipo pornografía que no esté dominada por representaciones heteronormadas y falócentricas del sexo. La idea es subvertir y mostrar que otro porno es posible. O tal como señala Fabián Jiménez Gatto : “lo pospornográfico señala esta dimensión de novedad en la representación de lo sexual, presente en ciertas manifestaciones culturales que resultan todavía un tanto inclasificables”.
Delphine recuerda que la iniciativa surgió a partir del diagnóstico de no encontrar producciones locales  de Posporno. “Tal vez existían producciones audiovisuales en esa onda, pero que no se identificaban como posporno, por ejemplo, en el dominio del videoarte. Y si existían, tal vez no reflejaban (bastante) nuestras preocupaciones de disidencia de género y  sexualidad”, comenta la miembrx de la CUDS.
Sin embargo, debido a que la producción de este género se centra en Estados Unidos y Europa, para estas experiencias se ha intentado buscar temáticas propias de este rincón del mundo.  “El taller intenta-modestamente-re-definir el posporno en el contexto chileno, pero es una tarea continua, siempre en curso, no tenemos idea definida de cómo lograrlo. Nos queda buscar y buscar, equivocarnos, y maravillarnos cuando algo sí ‘funciona’”, recalca Delphine. Bajo este propósito se utilizaron extractos del  Informe Valech para la primera de estas experiencias (”Pospornografía e Historia Reciente de la Violencia en Chile“) , taller realizado en la sede de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Fech, lugar utilizado como centro de torturas durante la dictadura.
Taller de pospornografía en la fech
Pospornografía a la medida
Luego del éxito del primer taller, la CUDS se propuso organizarlos de forma más recurrente.  De este modo el 9 de diciembre del año pasado, se realizó “Wena Cisarro”. Esta segunda iniciativa se centró en los discursos de criminalización, infantilización, (des)sexualización y patologización de la infancia, tensionando a dos personajes locales: el “niño-delincuente-violador” ( “Cisarro”), y la “niña inmoral” (” Wena Naty”). El siguiente taller se realizó el 3 de abril pasado y se tituló “Pubis Salvaje”, el cual buscó explorar y subvertir la representación del sexo civilizado (higienizado, normativo y consensuado) y el salvaje, instintivo e impulsivo, generando debate en torno a lo que corresponde al cuerpo o a la cultura.
Al igual que los ejes temáticos, la metodología va cambiando según el diagnóstico que se hace después de cada sesión, aunque algunas metodologías se han mantenido a lo largo del tiempo. Las inscripciones se realizan a través de correo electrónico ( cuds@cuds.cl) y sólo a quienes se inscriben se les revela la locación donde se llevará a cabo el taller. Se considera un cupo de 15 inscritos, no obstante, el número de participantes ha oscilado entre las 15 y 30 personas por taller (incluyendo el equipo técnico). ” Para “Pubis Salvaje”, llegamos a ¡60 inscritxs! Suele pasar que muchxs de éstos no llegan el día de grabación, pero ya sean 10 inscritxs o 25, siempre la sesión se desarrolla en condiciones óptimas”, destaca Delphine.
Una vez que los participantes llegan hasta las reservadas dependencias, se toma el tiempo para que todos se conozcan y así se pueda vencer la timidez con la que vienen muchxs. Cada unx se presenta, lo que genera conversaciones informales entre todxs los participantes y el equipo. En este momento entran en contacto con los accesorios y algunas revistas. Lxs participantes suelen llegar en compañía de amigxs, lo cual ayuda a que se suelten. Iindependientemente de lo anterior, lo importante es que se sientan en confianza. “Me gusta lo que se genera. A pesar de que no conoces a nadie (salvo al equipo), se crea un ambiente súper íntimo. Dentro de esas horas que dura el taller somos todos uno, un cuerpo, una masa…”, comenta Andrea López, parte de equipo técnico.
Luego de esta etapa preliminar, viene una corta exposición sobre la Pospornografía y el tema específico de la sesión, se exhiben cortos del género y se debate al respecto. Para Delphine esta es una parte importante de cada sesió,n debido a que les brinda la base teórica y activista. “Porque el taller no es puro hueveo, onda ‘a enpelotarse y a hacer tonterías para ser famosos en YouTube!’. No, viene de una búsqueda de subversión corporal y ojalá audiovisual. Quizás te de lo mismo la parte teórica, pero a lo menos vas a saber porque lo haces”.
Después  se realizan juegos de teatro para así soltarse y fortalecer la buena onda colectiva. En un principio, lo que seguía a continuación era la presentación de argumentos o ideas base para la generación de un guión colectivo. Así se hizo en el primer taller. En el segundo, el equipo a cargo presentó mini-guiones de manera de motivar a lxs asistentes a que propusieran sus propias ideas de escenas. Sin embargo, a partir de “Pubis Salvaje” se decidió trabajar sin guión, con el propósito de que la gente interactúe, se inspire con el set y los accesorios  y, finalmente, improvise. Esta metodología resultó mucho más provechosa que la anterior con guiones establecidos. “La gente se soltó mucho más, hubo una lucha en barro gigante con tambores y la gente entró casi en trance!”, recuerda Delphine.
pubiswhite-slave-fr
Sin embargo, hay una diferencia radical entre el posporno extranjero y esta versión local, sin sexo real y hardcore. Y ya que no están las condiciones para ello,  se logra un taller más abierto e inclusivo, cuya meta es ver hasta qué punto la gente puede soltarse físicamente, entrando en contacto con desconocidos, delante o detrás de las cámaras. “En el fondo, tienes la libertad de participar como quieras . Siempre hemos cuidado de dejar que la gente se exprese como se sienta en el momento. No llegamos y le decimos qué hacer como si fueran herramientas de algo. En definitiva, la gente que asiste ES el taller. Nosotros sólo lo hacemos funcionar”, señala Andrea.
Un taller para todxs
“Lo atractivo de esto es que en el transcurso del rodaje pueden suceder cosas que no estaban planeadas, y que aporten a la dinámica que se había generado desde el principio”, cuenta Tania Ramírez, también parte del equipo técnico. Además esto dependerá de las disposición con la que lleguen los participantes y al nivel de desenvoltura al que estén acostumbrados. Tania también añade que “puede pasar que llegue alguien predispuesto a perder todo pudor pero luego se da cuenta que los demás están en una onda más desinhibida y decide ser voyeur. Puede pasar eso como también puede pasar que hasta nos impresionemos de nosotros mismos”.
Hay opciones para quienes tengan más complejos.  Tania explica que  “la cámara está a disposición de a quien se le antoje grabar. Algunos no quieren que aparezca su rostro en los videos, así que les ofrecemos opciones que no limiten su participación. Siempre habrá una alternativa para que el que tiene prejuicios con su cuerpo no se sienta incómodo”.
Algo que tanto Delphine como Tania y Andrea consideran importante recalcar, es que el taller no es sólo para “gays” . “Hay gente que piensa que la CUDS hacemos cosas sólo por y para maricones y tortas. Pero la CUDS no cree ni en el género, ni en el binario gay-hetero! Nos encanta cuando llega de todo al taller.  Hasta ahora han llegado participantes hetero hombre y mujer; queers; osos rudos; maricones gay pride; tortas estilo MUMS,; antropologxs en investigación (que igual terminan actuando); gente rara; gente tímida un tanto voyeur que se queda mirando o grabando en la esquina; gente sin género o con géneros mezclados; biohombres muy masculinos; biomujeres muy femeninas, y viceversa;  gente que rechaza definiciones, inconscientemente o no; sadomasoquistas y exhibicionistas”. Esa es la larga descripción que realiza Delphine a la hora de recapitular el tipo de asistentes a los talleres CUDS_SubPorno. ¿Alguien más se anima?.
Las próximas actividades posporno se realizaránel viernes 4 de junio y el sábado 5. La primera consistirá en un visionado de Posporno posfeminista y la segunda, un taller posporno Cyborg. Más información, aquí.
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Para saber más de Posporno: - Texto de Beatriz Preciado
Colectivo CUDS_Subporno
Una vez finalizada la experiencia de la filmación, queda la posibilidad de seguir subvirtiendo por medio de la difusión online. La idea es que el video “provoque  interés, calentura, asco, debate, etc. Y  creo que eso se logra mucho mejor cuando tienes un vídeo de calidad. Que se quede en la onda DIY (Do It Yourself), pero interesante al nivel audiovisual”, argumenta Delphine. Para cumplir este requerimiento se decidió conformar un equipo técnico encargado de la parte audiovisual.
Así se formó CUDS_SubPorno. Se trata de 9 personas- entre las que se incluyen Andrea, Delphine y Tania-  la mayoría estudiantes de Cine, que funcionan como colectivo, al alero de la CUDS, distribuyéndose las tareas y roles para cada taller. Dentro de éste hay un montajista, co-montajista, sonidista, dos personas encargadas de la dirección del arte, y otras a cargo de la cámara, la iluminación, la charla teórica junto a la muestra y los juegos de teatro.